El próximo sábado 2 de Julio se cumplen cinco años del triunfo electoral que llevó a Vicente Fox a los Pinos. No hay muchas razones para celebrar el aniversario. Más aún: El presidente de la República muestra signos de cansancio, hartazgo, fastidio o de alguna enfermedad que ya se plantea abiertamente como una eventual explicación a los frecuentes dislates y contradicciones en su conducta pública. Algunos políticos atribuyen su comportamiento al uso de medicamentos, en tanto especialistas excesiva tensión, una “falla del juicio de defensa muy inmediato, a falta de estrategia y de recursos” AUT Álvaro Delgado

El próximo sábado 2 de Julio se cumplen cinco años del triunfo electoral que llevó a Vicente Fox a los Pinos. No hay muchas razones para celebrar el aniversario. Más aún: El presidente de la República muestra signos de cansancio, hartazgo, fastidio o de alguna enfermedad que ya se plantea abiertamente como una eventual explicación a los frecuentes dislates y contradicciones en su conducta pública. Algunos políticos atribuyen su comportamiento al uso de medicamentos, en tanto especialistas excesiva tensión, una “falla del juicio de defensa muy inmediato, a falta de estrategia y de recursos” AUT Álvaro Delgado

El próximo sábado 2 de Julio se cumplen cinco años del triunfo electoral que llevó a Vicente Fox a los Pinos. No hay muchas razones para celebrar el aniversario. Más aún: El presidente de la República muestra signos de cansancio, hartazgo, fastidio o de alguna enfermedad que ya se plantea abiertamente como una eventual explicación a los frecuentes dislates y contradicciones en su conducta pública. Algunos políticos atribuyen su comportamiento al uso de medicamentos, en tanto especialistas excesiva tensión, una “falla del juicio de defensa muy inmediato, a falta de estrategia y de recursos” AUT Álvaro Delgado