Eran oficiales de bajo rango durante la dictadura militar de Augusto Pinochet. Participaron-con distitntos grados de responsabilidad- en asesinatos después del golpe de Estado en 1973. Sus actos quedaron impunes. Con el regreso de la democracia a Chile ascendieron hasta ocupar importantes cargos la actual cadena de mando del ejército. Pero la revelación reciente de su pasado obligó a la justicia chilena a abrir procesos judiciales en su contra, y ello cimbró a la cúpula militar del país.

Hay empresas a las que sólo les improtan las ganancias y hacen tabla rasa de su compromiso con la sociedad. Un ejemplo es la textilera propiedad de Isaac Saba, que durante décadas proveyó de fuentes de trabajo a la ciudad de Ocotlán y en marzo de 2007 suspendió sus actividades.