El ayatolá Alí Jamenei no es un fanático, loco, irracional o imprudente que busca oportunidades para agredir, como lo muestra este perfil intelectual. Eso significa que hay posibilidades para que Estados Unidos e Irán mejoren sus lazos, siempre que Washington convenza a Jamenei de que no tiene intenciones de derrocar a la República Islámica.

La unión Europea nació de las cenizas de la Segunda Guerra Mundial como un proyecto para forjar y mantener la paz y la prosperidad en Europa. Justo ahora, ante los problemas recientes y una ciudadanía europea cada vez más escéptica, los arquitectos del proyecto europeo deben apostar por una integración más profunda: la única manera de que Europa vuelva a ser competitiva y coseche los beneficios de la globalización sería que se embarcara rumbo a una unión política.

Invertir en el desarrollo de infraestructura internacional, una industria que alcanza los 60 000 millones de dólares, no solo tiene que ver con dinero, sino también es un imperativo estratégico. Sin embargo, Estados Unidos no ha logrado convertirse en un participante relevante en ese campo. Las empresas estadounidenses necesitan la ayuda de Washington para entrar al juego.