El único presidente nacido en Nuevo León ha sido catalogado como uno de los testaferros del general Santa Anna. Su larga trayectoria en los ejércitos realista, Trigarante y nacional, lo llevaría a formar parte de la cúpula de militares que dominó el destino de México en uno de los decenios más convulsos de su historia.

Después de la independencia, México vio el origen de su tradición gráfica periodística con la publicación de las primeras caricaturas políticas en títulos como El Iris, pero sería a partir la década de 1860 cuando éstas alcanzarían su consolidación dentro de los principales periódicos nacionales, aunado al surgimiento de un grupo de destacados y talentosos caricaturistas.