La difusión y los beneficios del concepto de logística inversa han despertado el interés de los diferentes sectores. Ya sea por cuestiones de responsabilidad social y ambiental, económicas o políticas, las empresas trabajan en el diseño de creación de valor a través de este esquema, el cual tiene un futuro promisorio.

El crecimiento de las zonas industriales en los diferentes puntos del país, la tendencia hacia la ergonomización de las empresas en sus diversas áreas y el desarrollo de mejores tecnologías han influido en el diseño de los productos para el manejo de la carga en el almacén y los centros de distribución. Las innovaciones en este tipo de equipos apuntan hacia la optimización del espacio y la reducción del tiempo de producción y se prevé un crecimiento de los sistemas y unidades cada vez más automatizados acorde con las necesidades del usuario final.

Frente al reto de redefinir nuestra red de distribución por la posible reducción de ventas, es importante acotar el universo de ventanas de servicio o número de clientes que hay que atender, es decir, analizar si son asiduos, pertenecientes a un mercado vertical u horizontal y qué patrón de comportamiento de consumo guardan, entre otras variables